TALLE

El Hombre no tendría nunca que ser como es
Sino fuese temeroso, irreductible, queda a pie
Bastaba a los otros responder con respeto
Y todos sin excepción le darían concepto.

Y este maldito vicio que lo entrega al vacío
Dejándolo siempre mas sólo y lleno de frío,
Amarguras le trae la vida un eterno infierno
Aunque el intente mostrarse siempre tierno.

No es que sea malo pero de veras incoherente
Con lo propio, los otros la vida que escogió
Y aún piensa que pasa incólumne por la gente.

Pobre criatura, buscando ávida una abertura
Para que pueda, al fin, lo que llamar de si,
Sin que para eso, sea preciso, una rotura.